Buceando en el inmenso mar de la web, me encontré con retazos y breves dosis de un mito que siempre estuve por descubrir: Sumo. La leyenda muchas veces me había golpeado la puerta, topándose con una curiosidad dispersa como para atender el llamado.
Pero esta vez fué diferente. Luego de varios días de recorrer la vida y obra de Luca Prodan, sus inicios y posterior huracán escénico, me topé con entrevistas. Reflexiones, más bien lúcidas, inteligentes, sensatas. La mirada de un anglo-italiano, sus desventuras en un país que le era totalmente ajeno y le temía a sus excesos y modales resultaron un cóctel irresistible.
Pero esta vez fué diferente. Luego de varios días de recorrer la vida y obra de Luca Prodan, sus inicios y posterior huracán escénico, me topé con entrevistas. Reflexiones, más bien lúcidas, inteligentes, sensatas. La mirada de un anglo-italiano, sus desventuras en un país que le era totalmente ajeno y le temía a sus excesos y modales resultaron un cóctel irresistible.
Luego fuí más allá y me metí en un terreno ineludible, el que definiría la contienda: La música. No se puede abordar a Luca y a Sumo sin adentrarse en la sonora huella que los escasos discos de la banda dejaron. Pese a que mi estilo músical no cuadraba dentro de los canones más puros que el grupo representaba, el sonido, la rebeldía punk y la contundencia me abrazaron y me llevaron a la época de la post dictadura, donde servían para despertar mentes dormidas a puro bastonazo y Falcon Verde.
Temas clásicos que para mí significaban no más que inscripciones en paredes o títulos "creativos" en ciertos medios, se transformaron lentamente en gritos de desafío, de confrontación. Y esa concepción inicial de banda caótica (que lo eran, sin duda) mutó en una de banda caóticamente creativa, insubordinada, emergente de una generación que salía del miedo teniendo mucho que decir.
Pasé 5 días solo en casa, acompañado en gran medida por Mollo, Daffunchio, Troglio, Pettinato, Arnedo y Luca Prodan. Canté canciones en inglés y castellano. Regué cada lugar que visité con los temas que habitaban mi Mp3. Transformé un mito lejano en un mito cercano. Convertí la historia de un pelado italiano y su banda en parte de mi banda de sonido personal.
Estos temas servirán como respaldo de los conceptos vertidos. Sientanse libres de degustarlos.
SUMO - MI BANDEJA
SUMO - LOS VIEJOS VINAGRES
SUMO - EL OJO BLINDADO
SUMO - NEXTWEEK
SUMO - FUCK YOU
SUMO - CRUA CHAN
Comentarios
Me paso casi lo mismo que a vos en el descubrimiento de esta genialidad traducida en Sumo...
A pesar de que la musica no puede analizarse (o en ultima instancia, es muy dificil explicar con "racionalidad" algo que no lo es), me pasa que, dentro de mis gustos musicales, tengo "deudas pendientes", pero Sumo llegó de sopetón (y esas sorpresas son las mejores). Un dia estaba escuchando Divididos (casi todos los dias los escucho) y algo me dijo: andá al origen... Fue una de las pocas veces que hacerle caso a un presentimiento me llevo a enamorarme a "primera escuchada".
No me pasa seguido conectar con una banda al toque, por eso lo maravilloso de todo esto...